Hojutsu y tanto jutsu
Introducción:
Las
artes marciales orientales mantuvieron una tradición milenaria vinculada a la
práctica de armas contundentes, cortantes, de filo, punta y arrojadizas que
requerían de un largo entrenamiento para lograr la pericia en la ejecución y su
efectividad en el campo de batalla.
En el siglo
XVI irrumpieron las armas de fuego en el panorama bélico, pero se mantuvieron
sin variantes hasta el siglo XIX, por lo que fueron incorporadas al
entrenamiento del guerrero como un conjunto de técnicas, “jutsu” en japonés.
Las formaciones militares contaban tanto con tiradores que empleaban mosquetes
como con arqueros, mientras que los combatientes infiltrados –conocidos como “ninjas”-
empleaban granadas de mano y pistolas. Ese conjunto de técnicas del empleo de
armas de fuego recibe el nombre de “Hojutsu” en japonés.
Cuando se
produjo la restauración imperial en Japón y la intervención de las potencias
occidentales en el gobierno de China, las artes marciales tradicionales fueron
relegadas a favor de la formación militar al estilo occidental con la
introducción de armas de fuego de repetición y la bayoneta para el combate
cuerpo a cuerpo. Sin embargo, los maestros de artes marciales continuaron trabajando
a lo largo del siglo XX para enfrentar las armas de fuego y sacarles provecho
adecuándolas a las destrezas del “budoka” (practicante de artes marciales”.
En el último
cuarto del siglo XX y en lo que va del siglo XXI, lo conflictos armadas se han
vuelto preeminentemente urbanos, por lo que las armas de corto alcance como
pistolas y subfusiles han tomado gran protagonismo y el combate cuerpo a cuerpo
con cuchillos ha llevado a incorporar intensas prácticas para los aspirantes a
combatientes de élite, por lo que en diversas fuerzas armadas y de seguridad
han sido convocados los maestros de artes marciales orientales para el
entrenamiento en esas habilidades.
G.A.E.P.
La Escuela de
Byakuren Kenpo fue voluntaria en el conflicto por Malvinas para entrenar a los
soldados en el combate cuerpo a cuerpo y luego fue convocado por fuerzas
policiales y de seguridad para entrenamientos adecuados a las necesidades de
cada fuerza. Por ello la E.B.K. creó el G.A.E.P. (Grupo de Adiestramiento Especial Puma) para
dar respuesta a esas demandas.
El entrenamiento
Los cinturones
negros de la Escuela de Byakuren Kenpo están preparados para adecuar las técnicas
del arte marcial tradicional a las necesidades actuales de defensa policial o
de combate militar, ya que se trata de requerimientos diferentes para
situaciones muy distintas.
La práctica
incluye el combate a mano limpia, con armas contundentes (tonfa – varita), con
armas de filo (cuchillos y machetes) y con armas de fuego (pistolas, escopetas y
subfusiles).